Al conocer la historia de Abraham, sabemos que su vida es un ejemplo de obediencia, fidelidad y entrega. Él siempre estuvo dispuesto a escuchar la voz de Dios y obedecer. David fue descendencia de Abraham, y los dos agradaron a Dios por que fueron obedientes. Abraham recibió la promesa porque obedeció, y en la hora de enfrentar el problema mismo en el momento de dolor el obedeció y Dios lo honró, así también hizo David que tuvo un corazón obediente por que oía la voz de Dios, él podía no haber aceptado la responsabilidad de ser rey, pero obedeció.
La única cosa que Dios quiere de nosotros es la obediencia, si tiene en su corazón alguna cosa que desagrade a Dios, usted va a enfrentar esa situación, es ese su desafío y así como Abraham y David que vencieron, asi también será con ustedes. (decir eso a los niños)
*Preguntar a los niños y adolescentes: ¿Qué es lo que quiere que Dios haga en su corazón?
Lo que Dios espera de nosotros es que seamos obedientes, si quiere alguna cosa de Dios primero limpie su corazón y obedezca su palabra y él hará realidad sus deseos.
Deléitate asimismo en el Señor, Y él te concederá las peticiones de tu corazón.
Salmos 37.4
Educadoras llevemos a los niños a comprender la importancia de siempre escuchar la voz de Dios, que así como hablo con Abraham ahora él también está hablando con nosotros, y El conoce cada uno de nuestros sueños y quiere no solo realizarlo si realizar sus propios sueños en la vida de aquellos que obedecen.
La palabra principal de esa campaña es OBEDIENCIA, todo este mes hablaremos de David y en esas dos primeras semanas de Abraham y lo que ellos tienen en comun es que eran obedientes, explicar a los niños la importancia de la obediencia unida a un corazón limpio.
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